14 enero, 2025

Vuelve Diputados a usar el ábaco

Por Jorge E. Leiranes

Caído ya en desuso, el viejo instrumento de sumar y de restar, vuelve a ser útil en la Cámara Baja de Uruguay.

Doce años comiendo con aceite, los integrantes de la bancada gubernista habían llegado a creer que legislar era tan sencillo, como hacer uso de la palabra tantas veces como fuese necesario, repetir hasta el empacho que todo ba vien, hacer oídos sordos a todo cuanto digan los otros y de vez en cuando alertar sobre la conjura de la derecha.

Pero ya antes de haberlo dicho en su canto la señora Sosa, se sabía que,  todo cambia.

Cambia a veces para peor, pero en otras -como en ésta- para mejor: no existen más las inequívocas mayorías.

Se resta cuando Mujica (Gonzalo) no alza su diestra, o cuando no lo hace Pérez (Darío).

No se sabe que hacer, si se resta o se suma, cuando corresponde que alce su mano zurda, Rubio (Eduardo); dependerá  de que los dardos no se atrevan a apuntar al populismo bolivariano.

¡Atento el ábaco! cuando se pronuncian los dos de la Gente (del Partido): Facello (Guillermo) y Peña (Daniel), integrantes de una de las bancadas menores de la oposición. No faltan ya, quienes con razón, los sitúan en la Quinta Columna del oficialismo, dado lo sospechosas de sus posiciones.

Habrá que ver, si matemáticamente  hay chance de recomponer la necesaria mayoría.

Y como nunca falta un roto para un descosido, nada se debería dar por cierto aún.

Hay algo que sí es seguro, de aquí en adelante no tendrán otra alternativa que negociar, convencer, tranzar y ceder, porque en definitiva, es esa y no otra, la rutina de los representantes en la democracia.

La pataleta del miércoles

Venían de obtener una victoria pírrica -aunque es difícil de creer que el señor Ministro del Interior, haya sido igual de reflexivo que el monarca de Epiro (según cuenta la historia, luego de su batalla contra los romanos, el rey Pirro exclamó: Otra victoria como ésta y volveré sólo a casa).

En realidad el ministro demuestra poca dignidad para con la reprobación de casi la mitad de la Cámara. Sigue arrastrándose, sin asumir que sería menos humillante, emprender a la brevedad el camino a su domicilio.

Pero está visto que no se pueden pedir frutos al árbol que no los da. Sería como pedir pirros al bicho.

Para evitar que se investigaran los turbios negocios con Venezuela, obtuvieron el voto decisivo del diputado único de UP. Pero quedaban más asuntos urticantes sobre la mesa.

El miércoles 16, al plantearse el tema de la fallida obra en construcción, de la planta regasificadora de Puntas de Sayago -paralizada desde febrero de este año- la bancada oficialista protagonizó un papel inusitado. Su reacción, la pataleta que tuvo, demuestra lo que decíamos antes: le cuesta a la coalición gubernista, comprender la nueva realidad.

La nostalgia que embarga al grupo parlamentario del FA -por la deserción de uno de sus representantes, que lo priva de la mayoría absoluta- lo ha llevado a perder pie y a no saber como sustituir, a partir de otras destrezas, el fatídico voto.

Como si no alcanzase con el cúmulo de irregularidades que rodean la adjudicación de la obra de Puntas de Sayago -y que son de público conocimiento, dado que desde agosto del año pasado la empresa Costa Fortuna presentó, ante Crimen Organizado, una denuncia por estafa contra GNLS y la OAS (esta última, presuntamente, la favorita del  anterior gobierno del FA)-  las investigaciones por corrupción que se llevan a cabo en Brasil, arrojan nuevas revelaciones que involucran al círculo más estrecho del expresidente Mujica, con los hechos indagados.

José Pinheiro, amigo del expresidente Luiz Inácio Lula da Silva, presidente de OAS, actualmente en prisión (condenado a 16 años por lavado de dinero y formación de organización criminal por el pago de coimas) se habría valido de Fernando Pimentel  (actual gobernador de Minas Gerais) –por ser allegado al “jefe de la Casa Civil” (¿?) de José Mujica– para gestionar, la adjudicación de la regasificadora.

La prensa brasileña al ocuparse del caso, no es menos confusa respecto a nombres, en cambio precisa pormenorizadamente  otros detalles de la operación. Según Folha de Sao Paulo, la coima pagada a un alto funcionario del gobierno uruguayo… (al que sólo identifica como el jefe de gabinete) alcanzó los 3 millones de reales (alrededor de un millón de dólares) y fue abonada en seis entregas de 500 mil reales cada una.

El deslucido pretexto de siempre

La bancada oficialista increíblemente volvió a responder con el deslucido pretexto de siempre; de que se trata de un show mediático de la oposiciónque bien podría ser el guión de la próxima novela de Globo… que se parece a una película de James Bond… y otras sesudas respuestas de igual o similar tenor.

La diputada del MPP, Lilían Galán en una memorable sobreactuación, alcanzó a lamentarse, ¡A dónde se llega por un mínimo rédito político!  -y en el colmo de la desfachatez- profirió: ¡Abusan de sus fueros!

Acusó luego al diputado denunciante Pablo Abdala, de cometer un claro hecho de misoginia y de machismo por no poder convivir con una mujer con poder, en alusión a las críticas que éste hiciera a la ministra Carolina Cosse, por negarse a responder los pedidos de informes de los legisladores de la oposición.

La buena noticia es que con los votos de todas las bancadas opositoras, más el voto del disidente Gonzálo Mujica, se aprobó la conformación de una comisión investigadora, de 11 miembros,  para indagar sobre los hechos denunciados. Si bien en la instancia se contó con los dos votos del Partido de la Gente -a la hora de adjudicar la mayoría en el seno de la comisión-  estos legisladores optaron por el criterio de la bancada oficialista y no por el de la oposición, que reclamaba -con toda lógica-  que se reflejara en la comisión, la misma proporción expresada al aprobar la investigadora.

Es evidente que en cualquier estado democrático, las escandalosas revelaciones denunciadas, habrían ameritado perentorias investigaciones, que esclarecieran de una vez, los hechos denunciados. Pero es tal el declive moral que ha alcanzado este gobierno que no es lógico, a esta altura, esperar una reacción positiva.

UA-78784837-1